Que lástima darme cuenta que mis percepciones son resultados de mis deseos. Y que lástima no saber como, a veces, esos deseos son capaces de que las percepciones se conviertan en aciertos, (que desilusión si no lo hacen).
Que realidades distintas las de mis estados; tan preferentes las dos y tan ciertas. Busco similitudes y al final, a veces mas, a veces menos... siempre soy yo.
somos un montón de espejos rotos... dice Borges
ResponderEliminar